Ambientación
LLEGA LA SINGULARIDAD
Los humanos tenemos una manera especial de crecernos y de derribarnos a nosotros mismos todo al mismo tiempo. Habíamos logrado más progreso que nunca, al coste de destrozar nuestro planeta y desestabilizar nuestros propios gobiernos, pero las cosas parecían empezar a pintar bien.
Con tecnologías acelerando exponencialmente, salimos al sistema solar, terraformando mundos y sembrando nueva vida. Reforjamos nuestros cuerpos y mentes deshaciéndonos de la enfermedad y la muerte. Alcanzamos la inmortalidad a través de la digitalización de la mente, reenfundándonos de un cuerpo biológico o sintético al siguiente a voluntad. Ascendimos animales e IA’s para que fueran nuestros iguales. Adquirimos los medios para construir cualquier cosa que deseáramos desde el nivel molecular por lo que nadie volvería a pasar necesidad nunca más.
Pero nuestra carrera hacia nuestra extinción no se ralentizó. De hecho recibió un empujón al precipicio asistido por máquina. Miles de millones murieron cuando nuestras tecnologías dieron a luz a algo totalmente fuera de control… transformando a la humanidad en algo más, esparciéndonos a lo largo y ancho del sistema solar y encendiendo de nuevo conflictos atroces. Ataques nucleares, bioguerra de plagas, nanoemjambres, cargas masivas… mil horrores casi borraron a la humanidad de la existencia.
Todavía sobrevivimos, divididos en una amalgama de oligarquías restrictivas respaldadas por hipercorporaciones en el sistema interior y de hábitats colectivistas, redes tribales y nuevos modelos sociales experimentales en el libertario espacio exterior. Nos hemos extendido hasta las más lejanas extensiones del sistema solar e incluso dado el primer paso en la galaxia que hay más allá. Pero ya no somos solamente “humanos”… hemos evolucionado en algo simultáneamente mayor y diferente, algo transhumano.
Introducción
Un tiempo de Eclipse
Los humanos tenemos una manera especial de crecernos y de derribarnos a nosotros mismos todo al mismo tiempo. Habíamos logrado más progreso que nunca, al coste de destrozar nuestro planeta y desestabilizar nuestros propios gobiernos, pero las cosas parecían empezar a pintar bien.
Con tecnologías acelerando exponencialmente, salimos al sistema solar, terraformando mundos y sembrando nueva vida. Reforjamos nuestros cuerpos y mentes deshaciéndonos de la enfermedad y la muerte. Alcanzamos la inmortalidad a través de la digitalización de la mente, reenfundándonos de un cuerpo biológico o sintético al siguiente a voluntad. Ascendimos animales e IA’s para que fueran nuestros iguales. Adquirimos los medios para construir cualquier cosa que deseáramos desde el nivel molecular por lo que nadie volvería a pasar necesidad nunca más.
Pero nuestra carrera hacia nuestra extinción no se ralentizó. De hecho recibió un empujón al precipicio asistido por máquina. Miles de millones murieron cuando nuestras tecnologías dieron a luz a algo totalmente fuera de control… transformando a la humanidad en algo más, esparciéndonos a lo largo y ancho del sistema solar y encendiendo de nuevo conflictos atroces. Ataques nucleares, bioguerra de plagas, nanoemjambres, cargas masivas… mil horrores casi borraron a la humanidad de la existencia.
Todavía sobrevivimos, divididos en una amalgama de oligarquías restrictivas respaldadas por hipercorporaciones en el sistema interior y de hábitats colectivistas, redes tribales y nuevos modelos sociales experimentales en el libertario espacio exterior. Nos hemos extendido hasta las más lejanas extensiones del sistema solar e incluso dado el primer paso en la galaxia que hay más allá. Pero ya no somos solamente “humanos”… hemos evolucionado en algo simultáneamente mayor y diferente, algo transhumano.
Introducción
Un tiempo de Eclipse